En el robo a una casa de Belgrano al 500, la víctima, que se había ausentado en horas de la tarde, al regresó encontró el interior de la vivienda revuelto, y faltaban mil ochocientos pesos y un teléfono celular.
En el otro caso, un muchacho que vive en Eshuaia al 1500 también salió de su propiedad pasadas las 16 del domingo, y al retornaar se encontró con la puerta y la venta del frente rotas, y el faltante de un teléfono y un DVD. Por averiguaciones, se dio con el ladrón, otro joven de 22 años que vive cerca de allí, y que al ser descubierto entregó lo robado.