Sus encuestadores los ponen en aviso sobre el despertar colectivo de este sueño mediático de bombardeo publicitario; comparando pasado y presente; con la aparición de nuevos mesías de palabras fáciles, ya no alcanza con regalar pelotas, repartir subsidios, sacarse fotos, anunciar obras faraónicas y liderazgos en gestión; y negar abiertamente los dilemas crónicos que padece la sociedad, en cambio, comienzan las nuevas inspiraciones basadas en el simplismo, que se sabe cómo empieza pero nunca como termina, sacando boletos para cualquier tren.
El clima cambia con los nuevos tiempos de cambios, lo que parecía un verde esperanza se va trastornando amarillo madurado al sol; – nunca una wiphala-ya no hablan de las históricas banderas de los movimientos populares, la desmemoria los consume y vuelven las malas palabras: represión, mano dura, picanas manuales, cámaras, ciudades sitiadas y espiadas por un despiadado lente acusador de inocentes, persecuciones desde redes sociales.
No reconocen que El autoritarismo es un sistema de gobierno y una doctrina en la que todas las actividades de una sociedad están sometidas a los fines de los dirigentes y de la ideología totalitaria inspiradora del Estado. Logrando sus objetivos, los personajes luego del triunfo, recorren con largas caravanas al canto de de will rock you traducido en
Amigo, Eres Un Chico, Un Pez Gordo
Jugando En La Calle, Serás Un Gran Hombre Algún Día Te Vamos A Hacer Temblar…
Sin embargo, hay murmullos provenientes de un pasado reciente – que siempre volverán- y se van escuchando en el ya conocido final de esta gran aventura amarillista:” piquete y cacerola la lucha es una sola”, y así seguiremos preguntándonos una y otra vez ¿Porque nos pasó esto?
Ruben Eduardo Kelo Moreno