En el primero de los robos, producido en Capdevila al 500 y descubierto el último domingo, la hija de los dueños, quienes se encuentran de viaje, llegó a la casa a las 9.30 de ese día y se encontró con una ventana abierta. También comprobó que los ladrones se habían llevado un grupo electrógeno y una notebook.
El mismo domingo, un vecino domiciliado en buenos aires al 200 se ausentó pasadas las 19, regresando algunas horas después. En ese lapso, delincuentes ingresaron tras violentar una puerta balcón con rejas, ubicada en la parte trasera de la vivienda, y se llevaron dinero, una mochila y un celular.