El hecho ocurrió en ocasión de celebrarse los 75 años de la Iglesia Redentor, un templo evangélico que funciona en San Lorenzo.
La semana anterior, la provincia había anunciado la habilitación para la realización de celebraciones religiosas entre otras actividades, entre las que se encontraban los bares. Sin embargo, para las primeras la norma indicaba que solo podían asistir de a diez personas por turno.
En el caso de la Iglesia Redentor, y como protesta a la diferencia que se producía al no poder la misma realizar ceremonias salvo con capacidad reducida, resolvieron ambientar el interior del templo como un bar, con los pastores ataviados como mozos, y los fieles sentados en mesas que simulaban un local gastronómico, excepto porque las bandejas llevaban Biblias.
“¿Ahora si podemos abrir gobernador Perotti?” se manifestaron los pastores de la iglesia vestidos de mozos en las redes sociales haciendo alusión a la decisión de la gobernación de la provincia de Santa Fe de dar marcha atrás a el decreto número 487/20 en la parte en que permitía la habilitación de nuevas actividades como las celebraciones religiosas.
“Queremos ejercer nuestro derecho constitucional de practicar nuestra Fe. Nos preocupa que cercenen nuestros derechos”, expresó el pastor Daniel Cattaneo frente a los fieles.