Para la anécdota quedó el resultado, que fue 4 a 3 para los locales. Lo que queda es una cadena de actitudes que permitieron que dos pibes jugaran por el club de sus amores, y dieran rienda suelta a su pasión por el fútbol sin que su condición fuese un impedimento, en una tarde en la que el hecho recibió un fuerte respaldo institucional, y los pibes Ariel Llanos y Jorge Quiroga recibieron presentes de ambos clubes, de la Liga Cañadense y de todo el espectro político de la ciudad.
“Es un orgullo esta iniciativa de América, un club que trabaja siempre para la inclusión y contención social. Esto es un ejemplo de integración para la ciudad y el país”, expresó la intendenta, quien los acompañó en la fría tarde del domingo cuando ingresaron a la cancha.
Por otro lado, destacó que anteriormente Ariel y Jorgito colaboraron en tareas comunitarias en nuestra ciudad como en la limpieza del arroyo. “Ahora es el momento de que ellos disfruten y que sea en el día del padre tiene un significado especial”, agregó. El viernes en el despacho municipal la mandataria les obsequió un conjunto deportivo, acompañada por autoridades del club y de la Liga Cañadense.
Que dos chicos con síndrome de Down recibieran carnés habilitantes por parte de la institución que regla el fútbol de la zona, sienta un precedente digno de ser imitado. El público presente en la cancha del Apache, en una fría tarde cañadense, no pudo escapar a la emoción reinante.
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Fotos: Damián Garnero / Otrodia.com
