El panorama en Cañada de Gómez durante el corte producido en la mañana de este jueves, tras la falla en el sistema principal de la usina y que suministra energía a la ciudad y varias localidades aledañas, marcó la dependencia extrema de la energía eléctrica por parte de las actividades productivas, administrativas y sociales. Bancos y oficinas fueron los más afectados, así como las tareas en comercios que dependen del producto para funcionar.
En la zona céntrica, los bares y cafés estuvieron abarrotados durante la mayor parte de la mañana, ésa en el que “no hay sistema” resultó el hit del día. Poco antes del mediodía volvió el suministro en muchas zonas de la ciudad, mientras los residentes de las demás esperaban pacientemente el restablecimiento de la normalidad.