La mujer vive en Beresiartu al 700, en B° Jardín, y este miércoles por la tarde recibió un llamado telefónico en el que una voz la llamaba ‘abuela’. Ella nombró a uno de sus nietos, y el presunto familiar le dice que está secuestrado en una pieza y que para liberarlo exigen la entrega de oro y dinero.
Luego de solicitarle que no corte la comunicación le exigen que deposite todo el dinero que tenga en el canasto de residuos de la vecina, por lo que la víctima colocó 900 pesos en una bolsa de residuos y la ubicó donde se lo ordenaban.
Posteriormente, y desde el interior de su casa, observó por la ventana que una persona se llevaba el botín en una moto, escapando en dirección sur.