Los Registros del Automotor de todo el país comenzarán a distribuir las nuevas placas, y deberán entregar las viejas que aún tengan en stock. El sistema anterior y el actual convivirán, por lo que los usuarios que posean las viejas no deberán cambiarlas.
Las motos tendrán un sistema independiente: una letra, tres números y tres letras. Las placas, a la vez, se diferenciarán por color para distinguir a vehículos especiales.
La patente además dispondrá de factores que combatan la falsificación: estará recubierta por una lámina retrorreflectiva, un estampado de seguridad con efecto difractivo, una marca de agua y otra tridimensional.