A las 17.30 comenzó el simulacro. Desde una hora antes el boliche estaba colmado de chicos, a través de una puesta que trató de dar la mayor cantidad de visos de realidad al acontecimiento, con fiesta y música, hasta que nubes de humo comenzaron a cubrir el local.
El procedimiento dio inicio con la auto evacuación de los presentes, con las instrucciones del personal de la casa, desde el interior al patio, y de allí a la calle por la salida de emergencia. En menos de cuatro minutos casi la totalidad de los pibes estuvieron afuera, quedando en el interior las supuestas víctimas de principio de asfixia.
Momentos después llegaban dos dotaciones de Bomberos, ambulancias y Protección Civil, que procedieron al rescate de los que habían quedado dentro, y la posterior atención médica. Mientras tanto, personal municipal y de la policía establecía un perímetro de seguridad para evitar el tránsito en la zona desde que se declarara la emergencia.
Entonces, los bomberos evacuaron a los supuestos atrapados, que eran trasladados hasta las ambulancias para recibir los auxilios específicos en estos casos.
De esta manera, en alrededor de 30 minutos quedó despejada toda la escena del simulado siniestro. Posteriormente, los organizadores felicitaron todos los que actuaron en la emergencia, por la rapidez y seguridad con la que se manejó el operativo.