Una pelea que viene desde años atrás, para lograr una real pirotecnia cero, tuvo un nuevo capítulo en la tarde noche del miércoles, cuando, tras una convocatoria a través de las redes sociales, entidades y particulares que defienden vida y salud de los animales se congregaron en Plaza de Colectividades.
El objetivo es llegar a que efectivamente no exista pirotecnia en la ciudad, más allá de las ordenanzas que así lo establecen. En Cañada de Gómez existe cierta dualidad, tanto entre vecinos como instituciones, por la que se declama una cosa y luego se permite otra. Entre velar por la salud de los animales, o hacerlo por la prosperidad de quienes venden pirotecnia, un porcentaje bajo está claramente en una de las dos posiciones. El resto, la mayoría, adhieren a una posición oscilante según quien sea el interlocutor.
Se denuncia que se ponen en práctica vericuetos para eludir las normas escritas. Si se prohíbe la venta de pirotecnia, nada impide que particulares de buen poder adquisitivo la compren en cantidad en otras jurisdicciones, y luego la revendan en la ciudad.