Una totorense fue objeto de una artimaña por parte de una mujer, quien la llamó a su teléfono fijo haciéndose pasar por su nieta, y tras una charla a través de la que fue ganándose su confianza, la convenció de la necesidad de tener sus ahorros a buen resguardo a través de una caja de ahorro bancaria.
Posteriormente una desconocida, que se hizo pasar por enviada de la supuesta nieta del llamado, pasó por el domicilio de la incauta víctima, quien le entregó dinero en efectivo y alhajas de oro, que así pasaron a manos de la estafadora.
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La nieta que llama: una fórmula tradicional del cuento del tío
Esta vez la víctima fue una mujer de 73 años, quien vive en Totoras, y que terminó entregando ahorros y alhajas a una persona desconocida.
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