Un incendio está afectando un campo ubicado al sudeste de la ciudad, en calle Colombia, muy cercano al acceso a la autopista, y adyacente a un horno de ladrillos.
De acuerdo a la opinión de quienes están trabajando en el hecho, el origen de ese incendio es probablemente intencional, ya que algunas características son llamativas, como que desde el sitio donde comenzara, el fuego avanzó unos diez metros en contra de la dirección del fuerte viento imperante, lo que da idea de que se utilizó alguna sustancia facilitadora de la ignición. Felizmente se pudo controlar el avance de las llamas hacia las instalaciones o viviendas.
El incendio en cuestión comenzó alrededor de las 16.30, hora en la que recién se lograba sofocar por completo el fuego que durante casi veinticuatro horas afectó al basural, ya que comenzó a las 18 del domingo, y necesitó de un incesante aporte de camiones regadores que durante toda la jornada abastecieron de agua al personal de Bomberos que tuvo a cargo la exigente tarea de extinguirlo.
Referido a la investigación que se puso en marcha, considerando que una buena parte de los incendios que se vienen produciendo son intencionales, para tratar de al menos de evitar que éstos se produzcan, se corroboró que todos los días aparece un foco en distintas zonas pero en horario similar. “Si prestamos atención”, expresaba Héctor Van Vanselhoff, al mando de Protección Civil “veremos que casi siempre entre las 14.30 y las 15.30 es cuando se producen las alarmas por incendio en zonas aledañas a la ciudad”.
Es un hecho que el constante reclamo de la acción de los Bomberos está poniendo a prueba, severamente, la resistencia tanto del personal de Bomberos y demás integrantes de los servicios de emergencia, como del equipo que manejan, ya que los incendios se producen en zonas alejadas, a veces de difícil acceso para los vehículos, lo que se ve agravado por la sequia de los pastos y el viento constante de las últimas jornadas. En cuanto al personal, al tratarse de un cuerpo de voluntarios, el material humano se ve exigido de manera extrema, puesto que además deben cumplir son sus trabajos de todos los días, a la vez que prestan su asistencia a la lucha contra el fuego.