Las recomendaciones que difundió el Municipio, respecto del mantenimiento de natatorios de cualquier material durante el invierno, incluyen controlar el buen funcionamiento del sistema de filtrado, mantener limpio los bordes de la pileta, para que la materia orgánica no se convierta en alimento para las larvas, y aportar al agua el cloro indicado.
También, realizar el control del ph del agua, que debe estar entre 7,2 y 7,6. Por último, pasar regularmente el limpia fondos y quitarle las hojas, que se convierten en alimento para las larvas del mosquito.