El primero de los hechos tuvo lugar en Beltrame al 1100. Allí, el dueño de un Toyota que estaba estacionado vio a una persona en el interior del mismo, quien al verse descubierto salió corriendo. El propietario del coche comenzó a perseguirlo, a lo que se unió personal policial de un móvil que pasaba. Finalmente el delincuente fue interceptado en Moreno y Ocampo. El sujeto, de 19 años, tenía en su poder algunos elementos tomados del interior del coche.
El otro epidodio de ese día ocurrió cuando el dueño de una casa de O. Lagos al 500 adevirtió que un individuo intentaba romper el candado de la entrada, mientras que otro lo esperaba en una moto, en la que escaparon.
Con la descripción aportad por la víctima, personal de la comisaría 2da. y del Comando Radioeléctrico detuvo a un joven de 18 años en una casa de Castelli al 900. El dueño de esa propiedad dio cuenta que el muchacho ingresó saltando un portón, dejando delante de la vivienda una motoZanella de color blanco, que luego se comprobó había sido denunciada como robada pocos minutos antes.