Una fiesta clandestina que se desarrollaba en Armstrong, en la prolongación de la ruta 178 en inmediaciones del cementerio local, finalizó con la dispersión de los asistentes quienes se marcharon en más de 200 vehículos, según contabilizó el personal policial que acudió al lugar a raíz de una llamada al 911.
La concurrencia, advertida de la llegada de la policía y la inminente tormenta, partió presurosamente en distintas direcciones: Armstrong y Villa Eloísa por la 178, y al este por la 9, en dirección a Cañada de Gómez.
La secretaria de Gobierno de la ciudad, Daniela Pérez, prometió mayores controles de parte del municipio, y realizó la clásica apelación a la conciencia ciudadana y responsabilidad individual, debido al pico de casos de Covid 19 que se producen en Armstrong y la región.
Fuente: Armstrong y Región