La velada tuvo una nota saliente, como lo ue la llegada de la orquesta bonaerense que dirige el cañadense Roby Flores, pero no fue la única: estuvo la actuación sobresaliente de la Orquesta Municipal de Tango, y la presentación, como novedad, de la Orquesta Sinfónica Municipal, que arrancó así su trayectoria.
La noche comenzó con la Orquesta Municipal de Tango, que dirige Cristian Gustafsson, que dio una nueva muestra de su excelencia, tanto en su faz instrumental como cuando se sumó la voz de Ezequiel Martés. Piazzolla, Pugliese, Filiberto, estuvieron dentro del abanico de clásicos que interpretó la agrupación, a la que luego se le sumaron integrantes de lo que será de aquí en más la Orquesta Sinfónica Municipal, nutrida de alumnos de distintos instrumentos de la escuela Municipal.
Luego, el equipo de gestión municipal presentó los instrumentos que se han adquirido para la nueva orquesta.
Y de esa manera llegó el plato principal: la Orquesta Sinfónica Juvenil de la municipalidad de Hurlingham, dirigida por Roberto Flores, un conjunto afiatado que recorrió un abanico de obras que fueron desde Beethoven y Rossini, un número del musical “Chicago”, y un malambo de Ginastera, hasta dese,bocar en la sorpresa de la ncohe, cuando se sumó a la agrupación Héctor “Taka” Guerino en un par de temas populares. Así, Roby unió al pasado común de ambos en Los Clever’s, constituyendo un emotivo momento de la jornada, que finalizó con la unión de todos los que habían actuado, en un final merecido para la hermosa noche musical, con varios bises incluidos.
Un párrafo aparte lo merece Roberto Flores. Alguien que se fue de Cañada de Gómez muy chico, a cumplir con su vocación de seguir creciendo con la música. Una larga y rica trayectoria que no quitó nada de generosidad, que lo llevó a compartir la noche con todos los cañadenses que actuaron este domingo, recordando a familia y amigos, reencontrándose con su maestra de la primaria, y recibiendo el mismo cariño y respeto que entregó a raudales.