“El nivel de los servicios públicos genera reclamos en todos los barrios, y basta con recorrer la ciudad para entender el motivo: calles en mal estado, que en algunos casos se vuelven intransitables los días de lluvia; yuyos y árboles sin podar; una notoria falta de higiene en la vía pública, e incluso tenemos un basural clandestino a cielo abierto de la propia Municipalidad”, enumeró Fernando Mauroni.
En este contexto, el concejal del radicalismo hizo especial hincapié en su presentación sobre la falta de iluminación y reposición de luminarias en distintos puntos de la ciudad, argumentando que esta situación no colabora en mejorar la seguridad en Cañada de Gómez.
“Con mucha razón, los vecinos están reclamando mayor seguridad en nuestra ciudad, y nadie le pide a la intendenta que se haga cargo de responsabilidad ajenas. Pero si le exigimos que aporte en cuestiones básicas que le corresponden al Municipio, garantizando la iluminación de las calles como medida de prevención. Una ciudad mal iluminada, nunca podrá ser una ciudad realmente segura”, agregó Mauroni.
“Nuestra mayor preocupación, que compartimos con los vecinos, es que aumentaron considerablemente las tasas que cobra el Municipio pero este aumento no se ve reflejado en una mejora en los servicios públicos, que son cada vez peores. Por esto, nuestro reclamo apunta a que el dinero de los contribuyentes se traduzca en soluciones reales para la vida cotidiana de los cañadenses”, concluyó el edil.