El hecho ocurrió en la noche del jueves. La denuncia fue por la molestia ocasionada por la corrida de picadas en la zona de Oroño y Entre Ríos, pero luego derivó en el secuestro del vehículo utilizado para esa actividad.
Se trataba de un ciclomotor Zanella negro, sin patente, el que el conductor, un adolescente de 14 años, dijo haber adquirido días antes por la suma de 700 pesos. No poseía ningún papel identificatorio del rodado, que sí presentaba los guarismos adulterados.
El menor fue llevado a la Jefatura, acompañado de su madre, y se le dio conocimiento al Juzgado de Menores de la 1era. Nominación de Rosario, mientras que la moto quedó secuestrada a fines de efectuarle las pericias correspondientes.