El primero de los casos tuvo lugar entre las 8.30 y las 14.30, lapso en el que la propietaria de la vivienda de Independencia al 100 estuvo ausente.
A su regreso descubrió que un vidrio de la puerta trasera estaba roto, y del interior faltaban una notebook, una caja de herramientas, una aspiradora y una afeitadora.
Por la noche, la dueña de una casa ubicada en Av Argentina al 1400 encantró a su regreso, a las 23, que habían forzado una puerta lateral de su domicilio, pero no constató el faltante de elemento alguno.