Este lunes, un menor sustrajo un teléfono celular de la estantería del negocio de venta de artículos electrónicos ubicado en Lavalle al 900, y sus características físicas las aportó a la policía el propietario del comercio.
En la noche del mismo lunes, alrededor de las 21, se denunció desde FATA (Federación de Transportistas), a través de su presidente, que personas no autorizadas habían ingresado al predio de la entidad, ubicado en Suipacha y Avellaneda. Efectivos de la policía realizaron una recorrida por el lugar, y lograron divisar, escondidos entre los árboles, a tres menores, quienes fueron trasladados a la comisaría.
Posteriormente, se determinó que uno de los menores coincidía con la descripción del comerciante respecto del autor del robo del teléfono.
Tras consultar con el juzgado interviniente y la Secretaría de la Niñez de Rosario, se ordenó que tras los trámites de rigor, los jóvenes sean entregados a sus progenitores.